3 obras del autor: il Bamboccio - (Pieter van Laer)
Clasificador |
N° de obras |
Siglos XVI y XVII. Barroco | |
- Escuela holandesa. Costumbres e Historia | 3 |
Apunte Biográfico |
Pieter van Laer (Haarlem, h. 1599 – h. 1642), también conocido como Pieter van Laar o Peter van Laer, fue un pintor holandés de escenas de género o cotidianas, que alcanzó la fama durante una década de actividad en Roma. Fue más conocido como «Il Bamboccio» («el fantoche»), apodo que dio origen al término bambochada, que se refiere a la temática de cuadros que solía pintar.
Nacido en Haarlem, residió en Roma desde 1625. La influencia de la pintura italiana se detecta en sus paisajes y fondos, pero en cuanto a temas se mantuvo fiel a la tradición holandesa. Se volcó en el mundo campesino: mercados, fiestas populares, escenas de caza. Comparado con el arte italiano predominante, de cuidada estética y contenido intelectual, su estilo resultaba tosco y casi feísta, con personajes rudos y poco agraciados. Sin embargo, hay que aclarar que el apodo bamboccio (deforme, grotesco) no se debía a los cuadros del pintor, sino a su propio físico. Coincidiendo con el auge de un naturalismo costumbrista derivado de Caravaggio, Van Laer se puso de moda y su producción, denominada bambochadas, fue imitada por varios pintores que residían en Roma, mayormente holandeses como él: Jan Both y su hermano Andries, Jan Miel...así como el ecléctico Sébastien Bourdon y el italiano Michelangelo Cerquozzi. Ellos fueron igualmente llamados bambochantes. Van Laer regresó a Holanda hacia 1639, y vivió habitualmente en Ámsterdam y Harlem, donde falleció hacia 1642. Las obras de Van Laer destacan por su buen dibujo y cuidada perspectiva. Su gama de color es generalmente cálida, en tonos ocres, a veces luminosos pero generalmente oscuros y contrastados. Se le atribuyen algunos aguafuertes sobre animales domésticos (burros y perros). Su estilo fue despreciado por los pintores de mayor éxito en Roma y Bolonia, de gusto clasicista: Guido Reni, Francesco Albani, Andrea Sacchi... Pero ello no repercutió en su éxito comercial. Van Laer se movió en primer lugar en el mercado abierto y con la ayuda de marchantes, sin encargos directos, pero en una década pudo fijar precios respetables por sus obras (30 ó 35 escudos) y varios aficionados ilustres las coleccionaban, como Cassiano dal Pozzo, el marqués Vincenzo Giustiniani, el grabador Pietro Testa y el marchante flamenco Gaspar Roomer, que trabajaba en Nápoles. El estilo de Van Laer hubo de tener éxito en dicha ciudad, y en 1636 Van Laer dedicó una serie de grabados de animales al virrey de Nápoles, Ferdinando Afan de Ribera. (Información obtenida de Wikipedia) |